El vino blanco casi siempre se elabora con uva blanca. Aunque el proceso de elaboración es uno de los más complejos que existe en la producción del vino, a continuación se detalla brevemente cada uno de los procesos, que también se utilizan en la elaboración de otro tipo de vinos.
estrujado y despalillado: una vez recogida la uva, en la bodega se separa la uva del raspón y se estruja de forma controlada, obteniéndose el primer mosto por gravedad.
maceración: consiste en dejar la piel de la uva en contacto con el mosto un número variable de horas y a baja temperatura.
escurrido: este proceso es opcional, siempre por gravedad y con el objetivo de obtener un mosto de máxima calidad.
desfangado: consiste en separar el vino de los restos de hollejos, pepitas, tierra o cualquier partícula que pueda contener el vino.
fermentación: es la transformación del zumo en vino mediante unas levaduras naturales que se comen el mosto, liberando alcohol y anhídrido carbónico.
trasiego: paso del vino de un recipiente a otro para dejar restos sólidos en el anterior.
clarificación: normalmente se realiza con sustancias proteínicas, normalmente clara de huevo. También puede realizarse mediante filtrado, pasando el vino por algún elemento poroso o por alguna membrana.
disfruta en cuarentagrados del blanco!!