El origen de la ginebra es holandés, derivado de la palabra junever, bebida que contiene enebro. Aunque su popularidad se debe al ejército imperialista británico y a la búsqueda de un medicamento para luchar contra algunas enfermedades, entre ellas la malaria o el paludismo.
Ambas eran enfermedades que causaban estragos en la India, afectando tanto a la población civil como a los soldados invasores, que eran británicos. Aparece así la tónica, compuesta básicamente por agua y quinina, elemento que minora los efectos de las mencionadas dolencias. En aquél tiempo la tónica era inmensamente amarga, por lo cuál se mezclaba con la ginebra Bombay, que ya se destilaba en la ciudad del mismo nombre. También tomaban gin tonic para celebrar la victorias logradas en las batallas.
Aunque se trata de un clásico, desde hace algún tiempo, el gin tonic es el rey indiscutible de los combinados, debido a su versatilidad; podemos tomarlo a cualquier hora del día: como aperitivo, digestivo o de fiesta. De ahí la proliferación de nuevas marcas de ginebra y agua tónica.
Pásate por cuarentagrados y disfruta del clásico en sus diferentes versiones. Te sorprenderá!
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